lunes, 1 de diciembre de 2008

El infierno

Corría el año 2001, yo era un gran empresario de una gran empresa. Estaba forrado, era solitario y el como la gente se tomara lo que les decía no me importaba mucho, vamos que era cruel, solo me quería a mi mismo.
No hablaba a mis padres desde hacía ya mucho tiempo y a mi hermana la deje de lado cuando estaba enferma. Yo debía pagarle una operación y no lo hice, cosa de la que me arrepiento.
¿Novia? No, como ya he dicho antes era solitario, vivía solo en mi enorme casa.
A los 41 años sufrí un infarto al corazón después de que mi secretaria me comentara que estábamos mal de dinero, que sería difícil recuperarnos de eso.
Tras mi muerte, lo vi, el infierno.
La ciudad de Madrid era la misma, mi casa también, pero había algo que fallaba, que convertía eso en un lugar horrible, la guerra, una guerra continua y cruel.
Todos estábamos obligados a luchar si no queríamos ser fusilados. ¿Creéis que allí no era posible morir? Pues claro que si, podías morir todas las veces que quisieras, pero no era agradable, sufrías tu muerte poco a poco.
Tras años en ese lugar llegue a saber que se podía salir de allí si tu comportamiento era bueno y te merecías el cielo.
Llegue a sentir amor por una mujer bella y buena. Ella llego a cambiarme totalmente. Aunque no justo en el momento en el que la conocí. Gracias a ella conseguí preocuparme por los demás después de ver a mucha gente morir.
Lo creáis o no, la conocí en el infierno aunque fuera una mujer buena para mí. Era una delincuente, robaba.
Tras aprender sus fallos ella paso al cielo y yo me quede allí solo durante unos 2 años.
Después de mucha meditación, de haber muerto muchas veces, lo comprendí, lo comprendí totalmente todo. Mi comportamiento cambio, salvé la vida de un niño pequeño (ya no era una persona cruel, me importaban los demás) y después de eso dejé el infierno.
¿Os preguntáis si es tan malo cómo dicen? Pues si, lo peor que os podáis imaginar.

lunes, 10 de noviembre de 2008

las dos muertes en el hotel

-infórmame de todos los acontecimientos
-el primer muerto fue jorge caeiro, padre de Kate caeiro, ahora niña huérfana. Murió tras ser empujado o haber caído a la cascada desde su balcón. Yo creo que ha sido un asesinato si me deja dar mi opinión, señor.
-¿ha averiguado algo sobre esa muerte?
-no señor, solo que había muchas personas que podrían haberle matado, por lo que he hecho un mapa con las habitaciones de cada uno y el motivo.
-¿algo mas que quiera decirme sobre esto?
-si, mi antigua compañera de trabajo de limpieza, Luisa Cabanas, limpiaba la habitación del difunto y me comentara, antes de ser asesinada, que sabia como ocurriera el incidente con Jorge Caeiro y que estaba cerca de averiguar quien fuera el asesino.
-¿no le llego a contar nada?
-no señor, el director del hotel nos interrumpió y tubo que irse a limpiar la cocina.
-Iré a interrogar al director a ver que sabe, tú mientras interroga a los huéspedes que puedas hasta las 5, que nos encontraremos en el comedor para merendar e intercambiar información.
No digas a nadie que de verdad eres Lidia Embade, la detective infiltrada
-si señor.

Fui a la planta de abajo, a secretaria a buscar al director del hotel. Estuvimos hablando un buen rato, pero como sospechaba, no sabía nada. El motivo de que las interrumpiera no era otro que, que la cocina estaba sucia tras ser usada después de dar la comida del mediodía.
Le pedí las llaves de todo el hotel para poder inspeccionarlas y le dije que no dejara que nadie se fuera ni entrara.
Eran ya las 5 y me fui al comedor a encontrarme con la detective Embade.

-señor, he interrogado a la señora de la habitación 115, ella no le conocía de antes, es mas, ella vive aquí desde que su marido murió en este hotel tras un infarto hace años, al parecer no estaba muy bien de salud.
-¿ha interrogado a alguien mas?
-si, también interrogue a la familia López. Son un padre y sus dos hijos, la niña de 8 años y el niño de unos 16. Vinieron aquí por motivos familiares. Al preguntar que motivos, el padre se cabreo y me echo de su cuarto.
-ellos tampoco han sido.
El director del hotel no sabia nada, pero me ha dado las llaves de todo el hotel, asíque iremos a la habitación 113 a ver que ha pasado con el señor Caeiro.

Fuimos a la habitación, primero petamos a la puerta por si estaba su antigua novia dentro, y efectivamente.
Nos abrió y entramos. Estuvimos hablando con ella sobre el tema y según se lo tomaba todo, no creo que fuera ella
Se fue al salón colectivo y nos pusimos a investigar la habitación, el lugar del crimen.
Parecía no haber nada extraño hasta que fuimos al balcón.
La valla de madera no había cedido, había sido cortada. Al ver para las partes rotas, se veía perfectamente como estaba el principio del corte perfecto.
Este caso ya era de un asesinato, no había duda.
Antes de irnos mí compañera miro las llamadas del teléfono, había una de ese mismo día, de esas dos horas que estuvo el solo en la habitación.
Era una llamada desconocida, pero esa llamada tuvo algo que ver, estoy seguro.
Eran las 12 de la noche y me fui a mi habitación, la 111, la única aparte de las del servio que estaba en la planta baja.
Me acosté en la cama y leí los apuntes de la detective Embade.
Los asesinos se habían reducido a 3 después de toda nuestra investigación:

-Ali Macvine y Jackson Ferrier, habitación 112.
Ali mantuvo una relación con Jorge Caeiro, tras saber que el se venia al hotel con su actual novia y su hija, vino con Jackson Ferrier para intentar darle celos, cosa que no funciono.
Jackson Ferrier estaba arto de Jorge, porque su novia solo se fijaba en el y no le hacia caso.
-Luis Jiménez, habitación 114
Ayudante de Jorge Caeiro, fueron al hotel por motivos de trabajo y al terminarlo le dio a Luis unos días de relax en el hotel con el.
Jorge lo trataba pésimamente, le insultaba, decía que su trabajo no servia nunca, que era un inútil…

Yo ya lo tenía claro y reuní a todos los huéspedes en el salón colectivo

-ya se que ha pasado y quien es el culpable de esta muerte y la de la señora Luisa.
-¿como?- dicen todos
-si. Las partes rotas de la valla tenían unos cortes perfectos en el inicio, alguien los había cortado y ese alguien entro en la habitación 113 desde la 112. Asíque los culpables se reducen a Ali Macvine y Jackson Ferrier.
-¿Cómo sabe usted que fuimos uno de nosotros dos? ¿Que pruebas tiene de ello?
-todo a su tiempo quería Ali.
Alguien llamo al teléfono de la habitación. Desde allí no se podía ver que pasaba en el balcón, asíque entro rápidamente, corto la valla y salio de allí. Mientras esto se hacia, otra persona entraba en la habitación, justo desde el momento que empezó la llamada para que así no se oiria la llave entrar en la cerradura.
Tras hacer esto esa persona llevo a Jorge hasta el balcón amenazándolo con algo para que así retrocediera, supongo que con un cuchillo.
Al llegar al balcón todo es fácil, se agarro a la barandilla y callo. Esto no dejó huellas por lo que os pareció bien hacerlo.
¿Verdad Ali y Jackson?
-nosotros no fuimos los únicos culpables de esa muerte, Luis fue quien hizo la llamada.
-¿yo? No, jamás aria eso
-¿como que no? ¡No mientas! Si nosotros vamos a la cárcel tú también
-¡silencio! Aun no he acabado.
Tras saber que Luisa sabia todo esto, decidisteis acabar con ella, sabíais que tomaba medicamentos asíque le echasteis veneno y todo solucionado ¿no es verdad?


Los 3 fueron detenidos, Kate Murray pidió la custodia de Kate y se la concedieron. Lidia Embade ascendió, llego a mi mismo cargo y ahora trabajamos juntos.
¿Quién sabe cuantos mas casos averiguaremos juntos?

martes, 21 de octubre de 2008

Caperucita roja

Hola, me llamo Fe Roz, el lobo Fe Roz y os voy a contar la verdadera historia de lo que paso con Caperucita roja.
Todo el mundo se piensa que yo soy el malo, pero no, soy todo lo contrario, trabajo en AALC (Ayuda A Los Ciudadanos). Mi trabajo consiste en infiltrarme entre los demás, como uno de ellos y cuando algo pasa, yo vigilo a esa persona y mando la información a la policía.
Caperucita roja no es la niña que pensáis, ella y su abuela estafaban a la gente con sus caras de niñas buenas.
Las estuve persiguiendo durante una temporada y le pase el informe a la policía. Me dijeron que las esposara y las encerrara, que esa misma tarde iría Caperucita roja a casa de su abuela porque estaba enferma. Así que aproveché para presentarme por el bosque, ya que el bus ese día no pasaba por su casa y era el único sitio por el que podía ir.
Ella estaba paseando cuando me presenté, le dije que se fuera por el camino más largo, engañada, ya que ella creía que llegaría antes por ahí. Aprovechando ese tiempo fui a casa de su abuelita para así encerrarla a ella y después a Caperucita.
Pete a la puerta, “Tok tok”, y le dije que era su nieta. Al principio no se lo creyó mucho, pero me dijo que la puerta estaba abierta y entré.
La encerré en el armario para así poder esperar a Caperucita y llevármelas a la comisaría.
Me disfracé, me metí en la cama y llegó ella. Entró, dejo la cestita de alimentos en la mesa y me preguntó cosas sobre mi cara. Al preguntarme sobre mi boca, por hacer la coña, le dije que era para comerla mejor, asustada se echo a correr.
La encerré a ella también en el armario y me comí todo lo de la cesta. Esque correr da apetito. Me eché una siesta y mientras dormía vino el cazador, me abrió la barriga con los ojos cerrados y justo en ese momento salieron la abuela y Caperucita del armario. Él pensó que yo me las había comido, ¡Pero que estupidez! ¿Cómo me las iba a comer?
Pensando eso, me llenó la barriga de piedras. Desperté y sentí mucha sed. Fui al río a beber agua y justo cuando me incliné, caí.
Tras el estrés de esta misión, deje mi trabajo y me prejubile.
Espero que después de esto, no sigáis pensando que yo soy el malo.
Un saludo Fe Roz, el lobo Fe Roz.

lunes, 20 de octubre de 2008

carta de amor

Os voy a centrar un poco en la historia para que entendáis todo lo ocurrido y el porque de esta carta.
Yo me llamo Sofí, soy una estudiante de 2º de bachillerato lesbiana a la que le gusta una amiga suya, a la que le cuesta decir lo que de verdad siente.
Ella es lesbiana también y yo lo que quería era que lo gritara a los siete vientos, le pretendía dar un ultimato. Quizás me pase un poco, peor me pareció lo mejor en ese instante.


25-9-2007

Querida Laura:

Esta carta te impactara un poco, por eso es por lo que te pido que te sientes y la asimiles.
Sabes que yo te quiero un montón, pero no aguanto tener que guardar lo nuestro en secreto, ¿Por qué? nos queremos ¿no? entonces lo demás nos tendría que dar igual, por lo menos a mi me da igual y ¿a ti? De eso no estoy tan segura.
Te voy a dar un ultimato, o les dices a tus padres que me quieres y que eres lesbiana o no les dices nada y lo nuestro se acaba.
En el caso de que decidieras decirlo, he mirado un piso y me gustaría compartirlo contigo, un paso más en nuestra relación, además ya llebamos un año y tres meses.
Tú decides.

Te quiere Sofí



La respuesta fue que se lo diría a sus padres asíque quede para ir a su casa a cenar y se lo contamos entre las dos. Sus padres no se lo tomaron mal, es mas, nos apoyaron.
No me esperaba esto en realidad, pero así mejor.
Al cabo de unos meses nos mudamos a la casa y ahora, en el 2008 estamos prometidas.
Espero que os gustara nuestra historia de dos.
A mi sinceramente, me pareció perfecta.